Los humanos somos especiales… Si se nos rompe la televisión, vamos a repararla o directamente compramos otra, si se avería el microondas, acudimos a un técnico para que lo revise, si se nos rompe un pantalón vaquero, vamos más pronto que tarde a ZARA a por unos nuevos, si tenemos dolor de cabeza nos tomamos un ibuprofeno… ¿Saben lo que hacemos si nos duele la espalda, un gemelo o una articulación?: ¡volver a tomarnos un ibuprofeno!
¿Por qué no acudimos al fisioterapeuta? Normalmente porque pensamos que el dolor remitirá o pasará automedicándonos; puede ser que sí, pero eso seguramente sea un parche que estemos poniendo al problema, y no una solución.
A continuación les especificamos 3 razones por las que deben acudir al centro de fisioterapia:
– Estar lesionado
Es quizás la más lógica, es decir, si practicando deporte o cualquier acción cotidiana, sufres una lesión, deberás acudir cuanto antes a tu fisioterapeuta. La evaluación previa que realiza un profesional de la fisioterapia es crucial para lograr una pronta recuperación. ¡No mordemos!
En ocasiones (muchas), las lesiones son consecuencia de partes del cuerpo que, aparentemente, nada tienen que ver con la zona donde padecemos el dolor, es decir, es posible que si acuden a un fisioterapeuta con un dolor de rodilla en su pierna derecha, realmente el problema lo está produciendo una esguince mal curado de su pierna izquierda.
– Más vale prevenir que curar…
La prevención debería ser una asignatura que se estudiase en los colegios, desde pequeños. Nuestro cuerpo no es una máquina que sólo necesite de una reparación cada 15 años y por garantía. El sobre-esfuerzo en una acción cotidiana, las lesiones de una práctica recurrente (o muy aislada) de un deporte… son cosas totalmente normales que, si tuvieran un tratamiento preventivo porque sabemos que somos propensos a tenerlas, aparecerían en menor número, incluso no tendríamos que padecerlas.
– Consejos saludables
Los fisioterapeutas primero somos personas y después profesionales, es decir, hemos estudiado, tratado, incluso padecido, muchas de las patologías con las que llegan nuestros pacientes. Acudir al fisioterapeuta puede servir para que lleven bajo el brazo, infinidad de consejos sobre cómo prevenir una lesión, consejos sobre alimentación de cara a mejorar el rendimiento de los músculos, técnicas de estiramientos, ejercicios de movilidad,…; siempre deben solicitar que dichos consejos sean personalizados y adaptados, en la salud no vale «café para todos». En nuestra clínica, por ponerles un ejemplo, antes de osar a dar consejos a nuestros pacientes, tenemos que haberles tratado y diagnosticado previamente, es decir, saber qué es lo mejor para ese cuerpo, esa articulación o esa patología concreta.
Como ven, estas tres razones por las cuales acudir a tu fisioterapeuta, tienen mucho peso. Y como siempre pensamos por y para ustedes, les damos una cuarta razón: ¡acude al fisioterapeuta por que mejorarás tu salud!
