Los expertos suelen decir que en algún momento de nuestra vida, sufrimos en mayor o menor medida, dolores de espalda. Principalmente nos podemos encontrar con dos tipologías: dolores agudos o crónicos.
Dolor de espalda agudo
Suele se un dolor muy pronunciado que se nota de manera intensa generalmente en la parte inferior de la espalda. Puede ser intermitente, pero normalmente se manifiesta de forma constante,variando solo la intensidad.
Este dolor de espalda puede estar provocado por una lesión o trauma directamente en la zona, pero también es frecuente que no tenga ninguna causa conocida. El tiempo de recuperación, aunque «cada paciente es un mundo», suele enclavarse entre las 6 y las 8 semanas.
El trauma es la manifestación más usual en aquellos pacientes con dolor de espalda agudo causado. Una contusión o un músculo desgarrado por una lesión de espalda puede causar dolor. Cabe resaltar que el tratamiento a corto plazo suele tener éxito.
Dolor de espalda crónico
Normalmente es un dolor intenso, bastante doloroso, sordo o ardiente en una zona de la espalda, incluso puede llegar a afectar a otras extremidades como las piernas.
En ocasiones se manifiesta como un sensible hormigueo que provoca que las actividades cotidianas puedan convertirse en un auténtico suplicio (casi imposibles de desarrollar) o llevarlas a cabo con bastante dificultad.
La temporalidad del dolor de espalda crónico tiende a ser muy prolongada. Puede ser el resultado de una lesión anterior que se curó (o mal curó) hace tiempo, o incluso puede tener una causa continuada, como daño en algún nervio zonal.
En nuestro centro contamos con especialistas que, a través de una valoración de espalda previa con las últimas tecnologías existentes, expondrán un diagnóstico y tratamiento para lograr eliminar o disminuir los dolores de espalda.
Otra actividad que se lleva a cabo en nuestra clínica es la Escuela de Espalda. Se trata de una toma de conciencia de nuestro cuerpo, para mejorar y mantener nuestra salud. Para ello realizamos un análisis de la postura, movilidad articular, estado de la musculatura que interviene en la funcionalidad de la columna vertebral y análisis de la composición corporal. Con estos datos podemos identificar y cuantificar el problema osteoarticular y muscular de la columna vertebral. Una vez que tenemos un diagnóstico, realizamos un trabajo personalizado en distintos niveles; trabajo a nivel del dolor con técnicas de fisioterapia y osteopatía; trabajo a nivel de la musculatura y de la movilidad articular como base para una buena higiene postural, mediante ejercicios en grupo dirigidos por licenciados en I.N.E.F. y fisioterapeutas.
Sobra decir que se realiza un seguimiento del tratamiento para comprobar la evolución de la persona, realizando nuevos análisis osteoarticulares, musculares y posturales.
Como ven, la espalda es una zona corporal muy propensa a dar problemas de salud, la buena noticia es que en nuestro centro ¡podemos ayudarte!
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